Y a veces nos pasa que, ¿cómo podemos ayudar a varios sin poder desmoronarnos nosotros mismos? A veces me dan ganas de ayudar a cuantos lo necesiten, pero...
El personaje del día de hoy dice tener muchos amigos, pero muy pocos de verdad, y se siente solo. Me simpatiza cuando está solo y sin coraza porque es él mismo. Por eso me dan ganas de acompañarlo y consolarlo pero como normalmente, no somos muy amigos, sino, solo compañeros y cada cual vive su propia vida, no puedo llegar de improviso y acercarme en aquel momento en que le vi llorar de desesperación. Si lo hubiera hecho, cuando volviera a recuperarse, cada uno volvería a interesarse en su propia vida y punto (aquí, Cheshire diría "pero podrían convertirse en amigos de verdad")...
Prefiero dejarlo así. Es genial tener amigos, pero muchos se salen del propio control; con muchos, es imposible dedicarse a todos por igual. Los amigos se cuentan con la mano, y el cupo está a tope en este momento... Por eso es que a veces la distancia destruye a las amistades, sea física o mental. Prefiero dejarlo en un encuentro casual en la calle en algún futuro, aunque eso no me deja tranquila ante la situación que empecé relatando.
Si, definitivamente las relaciones sociales son complicadas, en todas sus expresiones. Vivir en sociedad es complejo.
Cualquier persona humana dentro de su sano raciocinio, no dudaría ante actuar, pero, ¿qué es mejor? ¿arriesgarse a meter la pata o que el problema se solucione solo por quienes deberían actuar? porque suele suceder que a veces el que necesita ayuda, no la quiere recibir, o no la agradece.
Todas estas cosas me llevan a concluir: pienso MUY distinto a la masa. Para eso está el blog ¿no? Para, entre otras cosas, expresar los pensamientos alternativos que a viva voz no se reciben de buena forma... Hasta yo misma me considero un monstruo por decir estas cosas, pero así soy.
PD: No le estoy mandando indirectas a nadie que haya leído esto alguna vez.
El personaje del día de hoy dice tener muchos amigos, pero muy pocos de verdad, y se siente solo. Me simpatiza cuando está solo y sin coraza porque es él mismo. Por eso me dan ganas de acompañarlo y consolarlo pero como normalmente, no somos muy amigos, sino, solo compañeros y cada cual vive su propia vida, no puedo llegar de improviso y acercarme en aquel momento en que le vi llorar de desesperación. Si lo hubiera hecho, cuando volviera a recuperarse, cada uno volvería a interesarse en su propia vida y punto (aquí, Cheshire diría "pero podrían convertirse en amigos de verdad")...
Prefiero dejarlo así. Es genial tener amigos, pero muchos se salen del propio control; con muchos, es imposible dedicarse a todos por igual. Los amigos se cuentan con la mano, y el cupo está a tope en este momento... Por eso es que a veces la distancia destruye a las amistades, sea física o mental. Prefiero dejarlo en un encuentro casual en la calle en algún futuro, aunque eso no me deja tranquila ante la situación que empecé relatando.
Si, definitivamente las relaciones sociales son complicadas, en todas sus expresiones. Vivir en sociedad es complejo.
Cualquier persona humana dentro de su sano raciocinio, no dudaría ante actuar, pero, ¿qué es mejor? ¿arriesgarse a meter la pata o que el problema se solucione solo por quienes deberían actuar? porque suele suceder que a veces el que necesita ayuda, no la quiere recibir, o no la agradece.
Todas estas cosas me llevan a concluir: pienso MUY distinto a la masa. Para eso está el blog ¿no? Para, entre otras cosas, expresar los pensamientos alternativos que a viva voz no se reciben de buena forma... Hasta yo misma me considero un monstruo por decir estas cosas, pero así soy.
PD: No le estoy mandando indirectas a nadie que haya leído esto alguna vez.
2 comentarios:
¡Pero podrían convertirse en amigos de verdad! D:
Ay, me conoces.
Sin embargo, concuerdo en varios puntos; aunque lo veo desde otro ángulo.
Apoyar a alguien, ayudarlo, levantarlo... no es necesariamente convertirlo en tu amigo, o convertirte tu en amigo de esa persona. Puedes verlo llorar, abrazarlo sin conocerlo y decirle que todo va a estar bien. Incluso alzarte y proponer soluciones, pero siempre consciente de que lo que el otro quiere... es tu abrazo, tu abrazo desinteresado y desconocido, tus oídos que habrán olvidado su historia en cuando se haya ido.
Te conviertes en el apoyo invisible, ya no tienes nombre...
Lo ayudas por que es una persona a la que ves constantemente. Con la que compartes aire, que es tan persona como tú.
Tal vez te estarías reflejando en el y autocompadeciéndote en el camino (dudo que esto se entienda, pero carece de sentido de todas formas xd)... pero al final, no importa cuando puros o impuros sean tus pensamiento sobre la otra persona, cuánto te importe realmente o cuán amigo pretendas llegar a ser.
Y tal vez no puedas ayudarlo en nada, tal vez debas mantenerte alejado y no meterte en el tema... pero un solo abrazo sin ninguna explicación tal vez sirva.
"Hey, hola, espero que todo salga bien. Te mereces sonreír."
Me inspiré y hablés weas, asdf. No sense.
me quedo con el último párrafo (:
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